Día 2. KIKIRIKIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII

Buenos días a San Cristobal (a las 4 de la mañana, a las 4:02, 4:15, a las 4 y perro, a las 4 y gallo afónico… aquí los bichos no duermen o qué?) Finalmente un prudente 6 y media, los menos motivados a las 9 y tras comprobar que Prado mantenía las piernas encogidas, (condición sine qua non para saber a ciencia cierta que las constantes vitales seguían, en plan, estables) fue la mejor hora para levantarse y preparar los desayunos. Lenta y dominicanamente arrastramos nuestros cuerpos hacia “La Sirena”, el súper del barrio. 100 carros después y tras la vuelta a la adolescencia de Prado conseguimos salir del congelador/supermercado.
Antes de comer, unas gestiones finales, que no definitivas, para conseguir línea telefónica, internet, y saber donde no se debe bajar uno de la fregoneta o en su defecto, como evitar hacerse amigo de los chungos del barrio.
Por la tarde, tras casi agotar los comodines del público alimenticios, tuvimos la primera reunión sobre el horario del campamento para el cual no había prisa (menos de 48 horas de cuenta atrás, solamente). Momentos de reflexión, organización, arreglos, repartos, y otros y finalmente conseguimos re-re-recolocar los horarios definitivos temporales.
El P.Pedro nos llevó de paseo por San Cristóbal. Que si la tumba de Trujillo, que si los murales de Vela Zanetti, que si el ataúd en la cripta, en plan grima a tope, que: que pun que pan, en plan pasear.
Y tremendo riesgo en la rotonda de la muerte donde aparcamos los vínculos sin luces, ni intermitencias ni vainas de esas. Nos llevo también a la casa de Trujillo donde nunca vivió que es un mirador desde donde no se ve nada pero nos dio para aprender una gran lección: Amor de lejos, felices los cuatros.
Cansados de tanto en plan pasear, a casita, de cena: sangüiches, que pan que pun. Y luego a desesperarse con la rapidez del internet que hizo que el pobre y querido coordinador perdiera los papeles (y la consciencia aunque como ya sabemos manteniendo las piernas encogidas, duerme, no muere) Pero claro con unos cooperantes tan majetes que podemos esperar, que lo despierten y lo manden a descansar por su dura ardua e ingrata labor: NO!!! Los muy (***GRGRG $%&%&//(%(/¿?=)(/&%$•) le hacen fotitos, se parten la caja,… y habrá venganza (plato que se sirve frio en todos sitios menos aquí).